INTRODUCCIÓN A principios del siglo XX ya había agricultores que notaban la degeneración de la fertilidad de la tierra y de la calidad nutritiva de los alimentos. Cuando preguntaron a Rudolf Steiner qué podían hacer para remediarlo, éste organizó unas conferencias de trabajo en Koberwitz, al este de Breslau, abriendo el camino para un conocimiento de lo viviente, de lo anímico y de lo espiritual en la naturaleza, y con ello la posibilidad de conducir el trabajo con la tierra y sus criaturas hacia un “nuevo ordenamiento” donde lo natural se halla sobreelevado e integrado en lo humano. Este trabajo de 1924 se ha documentado en el libro "Curso sobre Agricultura Biológico-Dinámica": "... en el curso traté ante todo de desarrollar cuáles son las condiciones para que prosperen los distintos aspectos de la agricultura, .... cómo se desarrollan las plantas en toda su diversidad así como los animales, .... cómo propiciar una reforma de la fertilización y de la lucha contra las malas hierbas y las plagas, .... se trata de una cuestión eminentemente cósmico-terrestre". Y es que la agricultura es fundamental y esencial en nuestra vida. No existe campo del desarrollo humano que no se relacione directa o indirectamente con la agricultura. Actualmente se busca ansiosamente una garantía de alimentación saludable, libre de residuos tóxicos y prácticas no perjudiciales al ambiente. Surge entonces, un nuevo paradigma de agricultura que mantenga y mejore la fertilidad de los suelos que conserve y recupere la biodiversidad de las áreas degradadas y de cultivo. Una agricultura donde el trabajo agrícola sea capaz de proporcionar valores humanos socialmente justos, de viabilidad económica, que permita su sostenibilidad para la generación actual y las futuras. DE QUE TRATA... El trabajo agrícola biodinámico no consiste simplemente en la adopción de un cierto número de medidas más o menos independientes. Es por el contrario, un método o un procedimiento de acuerdo a un plan. Consiste en considerar al conjunto de todos los elementos y como interaccionan: suelos, animales domésticos y silvestres, plantas cultivadas y silvestres, bosques, riachuelos, lagos, inclusive el propio ser humano, su comunidad y su trabajo como gestor de procesos, así como aspectos más amplios como el clima local, las estaciones del año y los demás aspectos que determinan ritmos. Todo representa a un conjunto vivo de interacción mutua, que el agricultor tiene como misión conducir para la producción de Alimentos y forrajes, y para la sostenibilidad ecológica, económica y social del sistema. Ciclos de substancias y fuerzas ABONAMIENTO MEDIDAS BIODINÁMICAS PRODUCTOS DE CALIDAD Y CONSUMIDORES Uno de los objetivos principales de la agricultura es producir alimentos para el consumo humano y animal. Sin embargo, el desarrollo del modelo agrícola convencional se ha preocupado exclusivamente en obtener productividades crecientes provocando una decadente calidad en las Semillas y en el forraje. Desde el inicio, el trabajo biodinámico se preocupó en mejorar los valores nutricionales y forrajeros. Muchos experimentos han constatado beneficios de calidad en los productos biodinámicos, en comparación a los productos provenientes del cultivo convencional.
En el trabajo biodinámico se busca alcanzar al máximo el control y conocimiento de los ciclos biológicos. Esto permite la eficiencia de la utilización de recursos de acuerdo con el ya mencionado principio económico de aprovechamiento real de cada agroecosistema local y de los nutrientes disponibles. El ciclo cerrado o casi cerrado de las transformaciones ejerce dos efectos directos: en primer lugar, aumenta el grado de actividad de los nutrientes en circulación; y segundo, aumenta la producción-eficiencia por unidad de nutrientes. En el abonamiento químico-Mineral sólo son suministrados algunos nutrientes y se presume que el suelo proveerá el resto de los elementos nutritivos y factores de crecimiento. Es ampliamente conocido que el balance de nitrógeno y potasio en el suelo y en el vegetal se desequilibra cuando se emplean abonos minerales de alta solubilidad, el nivel elevado de un determinado nutriente puede ser absorbido en cantidades grandes, hasta en exceso, llamado "consumo de lujo", provocando desequilibrio en el balance de los demás nutrientes, que conllevan en la planta, una mayor susceptibilidad a plagas y enfermedades. Del punto de vista racional y biológico resulta evidente que este sistema de abonamiento es un proceso ineficiente y antieconómico. Por el contrario, el sistema de abonamiento orgánico-biodinámico es más equilibrado, vitalizando al suelo abonado con materia orgánica, Compost, estiércol, abonos verdes y preparados biodinámicos que le confieren no sólo elementos nutritivos sino fuerzas que estimulan una mayor producción cuantitativa y cualitativa. Esto significa construir realmente fertilidad.
Podemos afirmar que el ciclo cerrado ejerce un efecto conservador del sistema. La expresión "sistema" es empleada en el sentido de conjunto biológico: suelo, planta y animal; pudiendo ser independiente de su tamaño: una huerta, un campo de cultivo, una finca, una hacienda o toda una región agrícola.
En el modelo agrícola convencional, el suelo y los aspectos sociales se degradan irreversiblemente, mientras que en una empresa agrícola biodinámica bien dirigida, es posible aumentar de modo constante su potencial de producción y los beneficios sociales, porque se orienta hacia la sostenibilidad del suelo y del entorno social en una forma eficiente biológica y económicamente viable y socialmente justa.
Vida vegetal y del suelo
La vida es determinada por la disponibilidad e interacción de los factores Calor, luz, aire, Agua y nutrientes en el ambiente. Calor y luz, son factores macroclimáticos que están fuera del ámbito de la Tierra, provienen del sol y el cosmos. Por lo tanto, podríamos denominarlos factores cósmicos de crecimiento.
El aire y el agua son factores climáticos resultantes de las condiciones de calor en la atmósfera y en su conjunto condicionan al clima. Aspectos determinantes para la agricultura como las precipitaciones y su distribución, las temperaturas diarias y anuales, la intensidad de los vientos, formación de nubes, etc., generalmente presentan una cierta periodicidad y ritmo. Adicionalmente existen los efectos microclimáticos determinados por las relaciones locales del calor, aire y agua entre el suelo y las plantas.
Para pasar del sistema Natural al sistema agrícola, la principal acción es modificar los factores y su ritmo en función de nuestros objetivos de producción. Las técnicas agrícolas se basan principalmente en este principio. Los factores macroclimáticos no pueden ser modificados por el ser humano. Los factores climáticos han sido a lo largo de los años, influenciados perjudicialmente debido a las alteraciones ambientales provocadas por las quemas y destrucción generalizada de los ecosistemas naturales. En el microclima, el agricultor puede influenciar en forma particular, y es uno de los principales factores para obtener productos en cantidades y cualidades deseables.
Entre las prácticas más usadas en la agricultura biodinámica, están las siguientes:
-Protección contra vientos, a través de árboles y arbustos, produciendo
además beneficios innumerables, como el propio enriquecimiento paisajístico, diversidad
biológica, sombra, aumento de la reserva de agua en el suelo y en la humedad relativa;
permitiendo una mayor eficiencia fotosintética.
-Cobertura viva o muerta del suelo, reduce la evaporación de la superficie, protege contra la intensidad de la radiación solar y calor excesivo, protege contra el impacto de las gotas de lluvia (erosión), reduce el trabajo de desyerbe y protege la vida del suelo en forma general.
El abonamiento del punto de vista biodinámico, debe consistir en una vitalización de la tierra, es decir, otorgar al suelo elementos que permitan el estímulo creciente de su complejo biótico. Un suelo adquiriría, entonces, la tendencia a convertirse en un organismo enteramente vivo.
Las principales prácticas agrícolas para obtener tal vivificación del suelo son los abonos que incorporan materia orgánica y la utilización de preparados biodinámicos.
Las más comunes son el uso de compost: técnica ampliamente difundida en el mundo, que consiste en la Digestión controlada de residuos orgánicos, estiércol, paja, residuos domésticos, materiales ricos en carbono y nitrógeno, etc. que a través de un proceso de fermentación aeróbica, permite la formación de Humus estable de gran utilidad para la estimulación biótica del suelo.
Otra práctica recomendada es el uso de abonos verdes que consiste en el cultivo de determinadas especies de plantas cultivadas con el objetivo de incorporarlas al suelo en su máxima producción de biomasa en forma eficiente.
Y el uso de minerales suplementarios como calcáreo, fosfato natural, polvo de rocas y arcillas, que usadas correctamente estimulan las interacciones biológicas del suelo.
De una forma general, se debe realizar periódicamente un análisis de suelos en sus aspectos químicos, sus características físicas de textura, estructura y principalmente de su estado biológico.
Existen técnicas avanzadas para la determinación de la Vitalidad del suelo, como son la cromatografía en papel de filtro y la cristalografía del cloruro de Cobre.
Efectos cósmicos
El método biodinámico es un constante aprendizaje que permite la comprensión de las relaciones dentro del organismo agrícola. La práctica agrícola nos acerca a la comprensión de que la productividad y cualidad de los vegetales resultan de la influencia de dos grandes grupos de relaciones ambientales: las terrestres y las cósmicas. Los efectos cósmicos están determinados por los factores de calor y luz como ya se mencionara. Estos factores determinan los ritmos cósmicos, que caracterizan entre otros, la influencia de los ritmos lunares en el crecimiento vegetal. Investigaciones efectuadas durante los últimos 60 años, se volvieron más y mas conocidas, y mostraron muchas de esas relaciones cósmicas y sus efectos en los procesos biológicos. Innumerables relatos y trabajos experimentales elaborados principalmente en Europa, evidencian relaciones entre la época de cultivo, el crecimiento y la productividad.
No haremos una reproducción detallada de estos trabajos, sin embargo, cabe señalar que las principales relaciones observadas son, la existente entre la trayectoria ascendente y descendente de la luna con respecto a la intensidad en la dirección de fluidos de la planta y la llamada luna sidérica relacionando el crecimiento vegetal acentuando el desarrollo de determinado órgano de la planta (raíz, hoja, flor, fruto) según las constelaciones del zodiaco.
Hay que resaltar que la intención simplista de correlación solamente las fases de la luna con el crecimiento vegetal no es completa, pues son muchos otros aspectos que se muestran correlacionados (perigeo, apogeo, nodo descendente, nodo ascendente, etc.).
Preparados Biodinámicos
Los preparados Biodinámicos fueron desarrollados a partir de indicaciones del Dr. Rudolf Steiner en el mencionado CURSO AGRÍCOLA y desde entonces han sido objeto de investigación. Son materiales orgánicos y minerales que a través de un proceso de fermentación adquieren cualidades específicas. Estos preparados actúan de forma semejante a las medicinas homeopáticas, donde lo principal no es la sustancia en sí, sino la fuerza o cualidad de esta sustancia, es decir, la dinámica del proceso. Por ello que se usan cantidades mínimas, pero con excelentes resultados constatados en numerosos experimentos científicos.
Existen otros preparados, desarrollados a partir de los preparados básicos, entre éstos el preparado "Starter" del Prof. Pfeiffer, el preparado de "Fladen" de la Sra. María Thun y otros que podríamos clasificar como auxiliares. El preparado con Equisitum pueden actuar profilácticamente contra Hongos y enfermedades.
Para una mejor comprensión de los preparados es necesario profundizar en el estudio de los fenómenos y fuerzas en la naturaleza y la acción de cantidades extremadamente pequeñas desafía nuestra curiosidad científica, pues no ejercen un efecto de nutriente, sino de activador en los procesos metabólicos y de crecimiento en la naturaleza.
Este alto valor biológico del producto biodinámico le confiere a los agricultores una valorización de su producción frente al mercado debido a su buena calidad, sabor y conservación post-cosecha. De forma semejante, los propios agricultores constataron que una mejora en la producción de forrajes promovió efectos favorables sobre la salud de los animales.
El concepto de calidad debe ser desarrollado de una forma más amplia. El tamaño, la apariencia y la ausencia de daños externos deben ser tan o menos importantes que el aspecto nutritivo y las cualidades organolépticas como sabor, aroma y coloración.
Se construye un sistema en lo posible auto-suficiente, reduciendo al máximo la dependencia de los insumes externos, estimulando así principalmente el mejor aprovechamiento y reciclaje de los propios recursos del sistema con el objetivo de ser realmente económico y eficiente en el uso de los recursos.
En el trabajo biodinámico se busca alcanzar al máximo el control y conocimiento de los ciclos biológicos. Esto permite la eficiencia de la utilización de recursos de acuerdo con el ya mencionado principio económico de aprovechamiento real de cada agroecosistema local y de los nutrientes disponibles. El ciclo cerrado o casi cerrado de las transformaciones ejerce dos efectos directos: en primer lugar, aumenta el grado de actividad de los nutrientes en circulación; y segundo, aumenta la producción-eficiencia por unidad de nutrientes. En el abonamiento químico-mineral sólo son suministrados algunos nutrientes y se presume que el suelo proveerá el resto de los elementos nutritivos y factores de crecimiento. Es ampliamente conocido que el balance de nitrógeno y potasio en el suelo y en el vegetal se desequilibra cuando se emplean abonos minerales de alta solubilidad, el nivel elevado de un determinado nutriente puede ser absorbido en cantidades grandes, hasta en exceso, llamado "consumo de lujo", provocando desequilibrio en el balance de los demás nutrientes, que conllevan en la planta, una mayor susceptibilidad a plagas y enfermedades. Del punto de vista racional y biológico resulta evidente que este sistema de abonamiento es un proceso ineficiente y antieconómico. Por el contrario, el sistema de abonamiento orgánico-biodinámico es más equilibrado, vitalizando al suelo abonado con materia orgánica, compost, estiércol, abonos verdes y preparados biodinámicos que le confieren no sólo elementos nutritivos sino fuerzas que estimulan una mayor producción cuantitativa y cualitativa. Esto significa construir realmente fertilidad.
Podemos afirmar que el ciclo cerrado ejerce un efecto conservador del sistema. La expresión "sistema" es empleada en el sentido de conjunto biológico: suelo, planta y animal; pudiendo ser independiente de su tamaño: una huerta, un campo de cultivo, una finca, una hacienda o toda una región agrícola.
En el modelo agrícola convencional, el suelo y los aspectos sociales se degradan irreversiblemente, mientras que en una empresa agrícola biodinámica bien dirigida, es posible aumentar de modo constante su potencial de producción y los beneficios sociales, porque se orienta hacia la sostenibilidad del suelo y del entorno social en una forma eficiente biológica y económicamente viable y socialmente justa.
Vida vegetal y del suelo
La vida es determinada por la disponibilidad e interacción de los factores calor, luz, aire, agua y nutrientes en el ambiente. Calor y luz, son factores macroclimáticos que están fuera del ámbito de la Tierra, provienen del sol y el cosmos. Por lo tanto, podríamos denominarlos factores cósmicos de crecimiento.
El aire y el agua son factores climáticos resultantes de las condiciones de calor en la atmósfera y en su conjunto condicionan al clima. Aspectos determinantes para la agricultura como las precipitaciones y su distribución, las temperaturas diarias y anuales, la intensidad de los vientos, formación de nubes, etc., generalmente presentan una cierta periodicidad y ritmo. Adicionalmente existen los efectos microclimáticos determinados por las relaciones locales del calor, aire y agua entre el suelo y las plantas.
Para pasar del sistema natural al sistema agrícola, la principal acción es modificar los factores y su ritmo en función de nuestros objetivos de producción. Las técnicas agrícolas se basan principalmente en este principio. Los factores macroclimáticos no pueden ser modificados por el ser humano. Los factores climáticos han sido a lo largo de los años, influenciados perjudicialmente debido a las alteraciones ambientales provocadas por las quemas y destrucción generalizada de los ecosistemas naturales. En el microclima, el agricultor puede influenciar en forma particular, y es uno de los principales factores para obtener productos en cantidades y cualidades deseables.
Entre las prácticas más usadas en la agricultura biodinámica, están las siguientes:
-Protección contra vientos, a través de árboles y arbustos, produciendo
además beneficios innumerables, como el propio enriquecimiento paisajístico, diversidad
biológica, sombra, aumento de la reserva de agua en el suelo y en la humedad relativa;
permitiendo una mayor eficiencia fotosintética.
-Cobertura viva o muerta del suelo, reduce la evaporación de la superficie, protege contra la intensidad de la radiación solar y calor excesivo, protege contra el impacto de las gotas de lluvia (erosión), reduce el trabajo de desyerbe y protege la vida del suelo en forma general.
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